Fuente: ConSalud.es
Este martes se ha debatido en la Comisión de Sanidad del Senado la moción por la que se insta al Gobierno a la adopción de determinadas medidas para mejorar las condiciones de jubilación de las personas trabajadoras en la sanidad pública..
Un documento suscrito por el Grupo Parlamentario Plural; Junts per Catalunya, Coalición Canaria, Agrupación Herreña Independiente y el Bloque Nacionalista Galego. En concreto, plantean al Ejecutivo que negocie la posibilidad de una jubilación anticipada para el colectivo sanitario desde los 60 años. Una larga reclamación de los profesionales de la salud pública de nuestro país.
Una de las promotoras de la iniciativa y senadora del BNG, María Carmen Da Silva Méndez, ha aclarado en su propuesta que el sector sanitario tiene unos riesgos laborales específicos y, además, presenta una "elevada tasa de problemas de salud laboral". En este sentido, plantean que las trabajadoras y trabajadores de la sanidad pública están expuestos a "riesgos biológicos, químicos y a radiaciones ionizantes; asimismo, presentan riesgos psicosociales por estar en contacto permanente con la enfermedad y la muerte".
Igualmente, Da Silva alega que diferentes estudios prueban que "los turnos rotatorios (en horario de mañana, tarde y noche) están asociados a la aparición y desarrollo de enfermedades coronarias y cerebro-vasculares, así como a la depresión, al síndrome metabólico y al cáncer, entre otras", todas ellas, enfermedades que se acaban por cronificar y no desaparecen cuando se abandona el trabajo.
Por todo ello, la senadora gallega plantea mejorar las condiciones de jubilación de los sanitarios, para que aquellos con 60 años y una larga vida laboral, de más de 40 años de prestación de servicio, puedan disponer de coeficientes reductores para una jubilación voluntaria. "El personal sanitario fue esencial para salir de la pandemia, echaron el resto a costa de su propia salud. Continúan esperando que se tenga en cuenta en sus condiciones de trabajo", ha reflejado, sin olvidar que estos coeficientes reductores ya se aplican a "otros sectores profesionales altamente masculinizados."
A su vez, el vocal del Grupo Socialista, Rafael Rodríguez Villarino, ha resaltado que la sanidad es el pilar esencial del estado de bienestar y "no puede estar más de acuerdo con el espíritu que sustenta la moción". El socialista ha concretado también que el abordaje de cambios en el coeficiente reductor para la jubilación a través del correspondiente Real Decreto "se encuentra ya en vías de negociación". "La modificación de estos coeficientes es algo muy necesario", ha concluido.
Por parte del Grupo Popular, José Manuel Arada Lassa, vicepresidente primero de la Mesa, ha achacado que la moción "empieza mal", al resultar "excluyente para todos los trabajadores que trabajan en la sanidad privada", y ceñirse únicamente a los empleados públicos. Además, ha observado que la propuesta está "carente de memoria económica" y entra en el "debate estéril del genero". Finalmente, el popular considera que "llega a destiempo", dado el actual problema de falta de profesionales sanitarios que se vive en España.
Finalmente, la moción Grupo Parlamentario Plural para instar al Gobierno a la adopción de determinadas medidas para mejorar las condiciones de jubilación de las personas trabajadoras en la sanidad pública ha sido denegada con 17 votos en contra, por los 12 a favor y una abstención.